jueves, 10 de octubre de 2024

Finalistas cuarta categoría del XXVI Concurso Literario Grupo Leo

Seguimos publicando los cuentos y poemas de los finalistas de nuestro XXVI Concurso Literario. Esta semana le toca a la Cuarta  Categoría (5º y 6º de Educación Primaria). Si queréis leer vuestros cuentos o poemas aquí en La Tiza o en nuestro blog, ya sabéis que nos los tenéis que enviar a nuestro correo, que está al final de la página

LA CUEVA


Un día Ana, Claudia, Celia, Nieves y Vera se dirigían, como siempre, a explorar y buscar cosas que les pudieran interesar

Por el camino jugaban a que eran piratas, arqueólogas y todo lo que se les pasaba por la cabeza.

CLAUDIA: ¡Alzad la vela mayor! Dijo con un tono grave y fuerte.

NIEVES: Sí, mi capitana

VERA: ¡Se avecina tormenta!

CELIA: ¡Tenemos que volver a tierra!

Más tarde, de camino a casa vieron una cueva que su interior brillaba como el sol y, por fuera, tenía un color dorado como la miel caliente.

No se lo pensaron dos veces, entraron. Dentro de la cueva encontraron el agua más cristalina que habían visto jamás. De repente, oyeron un ruido y se fueron corriendo a sus casas.

Estuvieron toda la semana pensando en aquella cueva y los misterios que contenía. Hablaron horas y horas sobre ella y decidieron volver a ir. Como siempre, lo harían muy bien equipadas, llevando bañadores, gafas, paraguas, linternas...

Sabían que pasase lo que pasase no se moverían de la cueva. Y así ocurrió, cuando llegaron se bañaron en sus aguas y jugaron a que eran sirenas. Ana que era la más alta, sumergió la cabeza y, en el fondo, tocó algo duro. Entre todas lo sacaron con mucho cuidado y descubrieron que era un cofre, dentro había una dirección y, como no fueron, pero no sin antes terminar de revisar la cueva...

Encontraron un azulejo en la pared de la cueva que ponía “SECRETO”, lo presionaron y apareció una llave. Entonces se escucharon unos ruidos extraños. Ana se metió la llave en el bolsillo y salieron corriendo en la dirección en que se escuchaban los ruidos. Entonces sintieron como cinco sombras les tapaban la boca, les arrastraban hasta un barco y las dejaban a la deriva. Lo que esas personas no imaginaban era que Ana y Claudia iban al Club Náutico y sabían navegar. Como ya sabéis, iban muy bien preparadas. Así es que, Ana sacó de uno de sus bolsillos del pantalón una brújula y con ayuda de Claudia pudieron volver.

Al llegar a la cueva, recordaron que mientras les empujaban hacia el interior del barco, habían oído una voz de señora que les decía... “Vosotras, pequeñas curiosas, habéis descubierto mi secreto”...

Ellas no sabían a lo que se refería pero pensaron...

¿QUÉ OCULTARÁ AQUEL MANANTIAL?...

¿Y AQUELLA LLAVE?

Ana Valdenebro Díaz, 5º de Primaria

CEIP San Fernando, Alicante

 

UN VIAJE ENCANTADO


Había una vez un chico de 12 años que se llamaba Luís. Vivía con su hermano pequeño, Manuel, su mamá Clara y su papá Tobías. Un día, decidió hacer un viaje muy lejano: ¡a Japón!

Tomaron un avión gigante que volaba por los cielos azules y blancos. Luís estaba emocionado al principio, pero después de un rato, el viaje se volvió muy aburrido. Miró por la ventana y sólo veía nubes y más nubes. ¡Qué aburrimiento!

Por fin, llegaron a Japón y alquilaron una casa antigua. Era muy bonita, pero algo extraña. Luís pensó que era emocionante, pero su hermano Manuel tenía un poco de miedo. Por la noche, cuando todos estaban durmiendo, comenzaron a escuchar ruidos extraños. Eran como risas y pasos por toda la casa. Luís se levantó y fue a investigar con su linterna pero no encontró nada.

En los días siguientes empezaron a pasar cosas extrañas. Cada vez que alguien intentaba cerrar una puerta, ¡esta se abriría de nuevo justo detrás de ellos! Luís y su familia pensaban que era un problema con las cerraduras, pero resultó que un yokai travieso estaba jugando al escondite y les seguía las travesuras. ¡Hasta que finalmente atraparon al pequeño yokai y decidieron jugar juntos en lugar de asustarse!

Una noche, Luís y su familia escucharon ruidos extraños que venían de la cocina. Cuando fueron a investigar, descubrieron que los platos y los utensilios estaban bailando y haciendo malabares por toda la cocina. Resulta que un grupo de yokais estaba teniendo una fiesta secreta y decidió invitar a Luís y su familia a unirse a la diversión. ¡Fue una noche llena de risas y bailes locos!

Una tarde tranquila, Luís y su familia se sientan frente a la televisión. Pero de repente, la tele comenzó a cambiar de canal sin que nadie tocara el mando. Descubrieron que un yokai juguetón se había escondido detrás de la tele y estaba tratando de encontrar su programa favorito. Después de un poco de negociación y muchos chistes divertidos, el yokai finalmente les dejó ver su programa y se convirtió en el compañero perfecto para ver la televisión juntos.

¡Al final, resulta que la casa estaba encantada por yokais traviesos! Los yokais son criaturas de la mitología japonesa que les encanta hacer travesuras. Luís y su familia se asustaron al principio, pero luego se dieron cuenta de que los yokais solo querían divertirse.

Después de muchos sustos y risas, Luís y su familia se hicieron amigos de los yokais. Jugaron juntos, compartieron historias y se divirtieron mucho. Los yokais ya no asustaban a nadie, solo traían alegría.

Al final, decidieron que los yokais se quedaran a vivir con ellos. La casa encantada se convirtió en un hogar lleno de risas y amistad. Luís y su familia nunca olvidarán su aventura en Japón, ¡y menos a sus amigos yokais!

 

Hugo Martínez López, 6º Primaria

Colegio Sagrada Familia, Alicante

 

MI CLARINETE


Mi clarinete suena,

unas veces bien,

pero otras fatal,

aunque siempre te alegra su canto angelical.

 

A veces hace pitidos,

otras toca sin pensar,

a veces nos anima,

y otras canta con tan solo imaginar.

 

Muevo los dedos con esmero,

hacia las teclas voy pero espero,

hasta que el director dice que vamos a empezar,

y vuelve a sonar esa obra espectacular.

 

La canción ha terminado,

a casa hay que caminar,

pero mi clarinete no parará de tocar

su música particular.

Inés Quilis Gimeno, 6º Primaria

CEIP San Jaime, Onil

ACTIVIDAD

Escribe un cuento o poema con dibujo y envíalo por email a:

grupoleoalicante@gmail.com

No olvides poner tu nombre y apellidos, curso, colegio. Podría ser publicado en nuestro BLOG o en el suplemento La Tiza del periódico Información.

 

 

 

 

domingo, 6 de octubre de 2024

Libro del mes de octubre: "Poemario estrafalario de palabras olvidadas"

Reseña:

Soplamocos, perinola, golondrino, acerico, borceguí, tollina..... ¿alguien sabe lo que significan estas palabras? ¿Se usan en el lenguaje actual o son palabras ya olvidadas?

Juan Clemente García se propone con esta obra recuperar vocablos en desuso y lo hace en forma de poema y con mucho sentido del humor.

Las ilustraciones de Miguel Ángel Díez son el complemento perfecto que ayudan al lector a entender el significado de cada una de las 28 palabras que conforman este divertido poemario.

El autor:

Juan Clemente Gómez García nació por causas del destino en Valencia, vivió en Cuenca hasta los 30 años y ahora sigue viviendo entre Cuenca, Elche y Alicante.

De profesión maestro, cuando a los 11 años vio publicada su primera poesía en una revista, supo que el destino le había tocado con una varita mágica.

Sintió siempre la necesidad de inculcar la literatura a sus alumnos, por lo que se decantó hacia la literatura infantil. Sus obras han recibido numerosos premios desde 1981, tanto de narrativa adulta como infantil, nacionales e internacionales.

También escribió diversas obras de teatro y desde 1986 creó y coordinó el suplemento infantil escolar del Diario Información "La Tiza".

Le gusta el color amarillo, quedarse horas y horas pensando en las madrigueras de las musarañas y perder el tiempo imaginando soluciones a los problemas cotidianos.

El ilustrador:

Miguel Ángel Díez nació en Aspe, Alicante, en 1973. Es ilustrador y dibujante de cómic.

Trabajador incansable, forjado a sí mismo, ha creado un estilo propio de dibujo. No se le recuerda sin una hoja de papel, sin un lápiz en la mano, sin esa determinación en su trazo.

En el año 2002 fue seleccionado para participar en la adaptación a cómic de la novela de Joseph Conrad, El corazón de las tinieblas. Tras este encargo, da un giro a su carrera y abandona momentáneamente el dibujo de cómic.

Empieza a trabajar con el objetivo de entrar en el mundo de la ilustración. Lo consigue y en 2007 publica su primer libro ilustrado: Estela. Ese mismo año gana el 1º Premio del VII Certamen Internacional de Álbum Ilustrado Ciudad de Alicante.

 

POEMARIO ESTRAFALARIO DE PALABRAS OLVIDADAS

 

Acerico

Almohadilla que sirve para clavar en ella alfileres o agujas.

 

Era una lora chuleta,

repulida y pinturera,

era una lora coqueta,

iba siempre con chaqueta

y abrillantaba su pico

en un mullido acerico.


Borceguí

Calzado que llegaba hasta más arriba del tobillo, abierto por delante y que se ajustaba por medio de correas o cordones.

 

En Babia donde yo habito,

al lado de un chiringuito,

bajo la luz de un candil,

anoche asombrado vi

dos fantasmas marroquíes

con sábanas de organdí

y unos lindos borceguíes.


Morciguillo

Murciélago.

 

Érase un escuálido morciguillo,

que habitaba en un lúgubre castillo,

a punto estaba de morir de pena,

cuando un bravo mosquito trompetilla

con cuatro huevos le hizo una tortilla,

y brindaron saciados en la cena.


A troche y moche

Disparatada e inconsideradamente.

 

Una pulga trasatlántica

fue a París a hacer política

viajaba en un carricoche,

desayunaba escabeche

y decía yes a troche y moche.

Era una pulga británica.

 

Extraído de: Poemario estrafalario de palabras olvidadas

Autor: Juan Clemente

Ilustrador: Miguel Ángel Díez

Editorial: Iglú

ACTIVIDAD

Escribe poemas sobre alguna palabra que te suene rara, acompáñalos con dibujos y envíalos por email a:

grupoleoalicante@gmail.com

No olvides poner tu nombre y apellidos, curso, colegio. Podría ser publicado en nuestro BLOG y en el suplemento La Tiza del Periódico Información.

 

Grupo Leo