Los libros del mes de septiembre de 2014 del
Grupo Leo
EL AUTOR
Pep Castellano (Albocàsser,
1960) es pedagogo, escritor y cuentacuentos. Estudió magisterio y luego
pedagogía. Ha hecho teatro de calle, y ha bailado y cantado (danzas y canciones
populares). En cuanto a su labor como pedagogo ha sido reconocido con el Premio
Soler i Godes a la Innovación Educativa, galardón otorgado por la Fundación que
lleva el nombre del reconocido pedagogo valenciano Enric Soler i Godes.
Es autor de una treintena de libros, la mayoría de
literatura infantil y juvenil, por los cuales ha recibido galardones como el
Premio de Narrativa Infantil Vicent Silvestre, el Samaruc, el Enric Valor o el Carmesina.
Actualmente trabaja como técnico de formación de
animadores juveniles en el IVAJ de la Generalitat Valenciana, además de hacer
de cuentacuentos formando dúo con Canto Nieto.
EL LIBRO
Marta, una niña fascinada por el fútbol, ha conseguido
introducirse en el laboratorio de Conrado, un científico loco por el amor y la
ciencia. Juntos, deberán ingeniárselas para salir airosos de los líos que
provocan los experimentos de este curioso laboratorio.
Conrado es un científico aparentemente chiflado que
experimenta con distintos elixires. Uno de ellos, a base de kiwi, es el que
toma Marta, quien comienza a actuar como si estuviera en un anuncio
publicitario.
El libro habla de la amistad, entre Marta y Amado, de los
contratiempos que se viven en la niñez, pero también del amor entre adultos; un
amor aparentemente inalcanzable porque Conrado se siente atraído hacia María,
la madre de Marta, aunque ésta inicialmente no le corresponde e, incluso, logra
denunciarlo a la policía por el tema del elixir.
La novela muestra que la ciencia puede ser divertida y
que no está reñida con la vida cotidiana.
EDAD RECOMENDADA de 10 a 12 años.
CONRADO, UN CIENTÍFICO ENAMORADO
Efectos de la PPT
(Poción de la Publicidad Total)
Era yo quien se había bebido
la PPT de Conrado. Le eché la culpa a Chispa, pero me la había bebido yo......
Me la había bebido a escondidas, ¿comprendéis?
Es que yo había creído que
aquél vaso con la bebida verde era el filtro de amor y… En aquel momento, lo
que más me interesaba era quitarme de encima a Amado el Pesado. Por eso me lo
bebí. Y, bueno, va, os lo diré. También me interesaba Marcos, ¿vale? También me
bebí el filtro por él, si. Porque ya podía yo meter goles de bandera, ya podía
hacerle pases estupendos para que él rematara de cabeza,, ya podía intentar
hacer todo lo que a él le gustaba, que él solo tenía ojos para la babosa de
Carla, y, a mí, eso...
Sin embargo me había bebido
la poción equivocada y en lugar de la PAZ, me había tomado una PPT con sabor a
kiwi. El caso es que sabía bien y eso que a mi el kiwi, normalmente, no me
gusta, ¿sabéis? Pero ¿qué me había tomado? ¿Y si mi madre tenía razón y Coso
Brown era un científico loco y peligroso?
Estaba a punto de soltarle
algo gordo a mi compañera de clase cuando, de repente, vi al mosntruo de las
galletas en la bolsa de Light Cookies Chocolate. Se comía las galletas a
bocados, en plan bestia. Entonces noté los efectos de la PPT, música de
clarinetes en mi interior: “ nanaina, nanainaaa...” y ya no me pude controlar.
Me dio por hacer lo mismo que el monstruo. Así que le quité la bolsita a
Carademuñeca y me puse a engullir galletas, la mayoría cayeron al suelo pero me
puse más de siete en la boca, todas juntas, y las masticaba a la vez. Las
galletas se me pegaban a los bráquets y hablaba con la boca llena y parecía el
monstruo de las galletas de verdad, porque escupía trozos de galleta como un
animal,
…..
Cuando
ya no quedaban galletas en la bolsa, la tiré al aire. La bolsa se la llevó el
viento y yo la seguí con la mirada...Entonces vi una valla publicitaria en la
calle. Había una señora que enseñaba una botella de detergente y una camiseta
llena de manchas...
¡Sí! En cuanto la vi volví a
escuchar la música otra vez: “nanaina, nanainaaa...”. Me miré las manos y vi
que las tenía manchadas de chocolate. Y pensé en la publicidad. Yo sabía que
aquella señora manchaba y manchaba prendas de ropa porque estaba segura de que
su detergente lo dejaría todo perfectamente limpio, de manera que me puse a
hacer lo mismo. Limpié mis manos sucias de chocolate en el vestido rosa de
Carla Carademuñeca , mientras le decía:
- No se preocupe, señora. No
hay mancha que se le resista a Kalielpot. ¡Ni las más difíciles!
…..
Fué entonces cuando vi la
Nani Patinadora dibujada en la mochila de Carla y la poción de Conrado me
volvió a afectar. Ya lo sabéis, la música de los clarinetes, un cosquilleo
especial en la barriga... Y noté cómo me transformaba en aquella muñeca
publicitaria. Noté que a mi alrededor todo adquiría una tonalidad rosa. Tuve la
impresión de que llevaba unos patines en los pies. Otra vez era incapaz de
controlar mis acciones. Ya no pude parar: “nanaina, nanainaaa”. Ni siquiera les dije adiós, por suerte,
porque Carla no venía con ganas de charlar, precisamente. Huí empujada por una
fuerza muy superior a mi.
…..
El
problema lo tuve cuando, al terminar, me dio permiso para ver un poco la tele.
Mientras
ponían dibujos, todo iba como una seda. Estaba viendo una serie con unas niñas
que aún llevaban pañales pero que ya eran heroínas y que hacían de todo... ¡Sin
problemas! Pero, al llegar el descanso publicitario: “nanaina, nanaina”, la
musiquilla empezó a sonar dentro de mi cabeza, noté las cosquillas en la
barriga y supe que la primera publicidad me afectaría. Se trataba de un juego
de artes marciales para la consola.
Los
personajes se convertían en monstruos y se atacaban los unos a los otros, y yo
empecé a hacer las mismas acrobacias que aquellos monstruos ninja y a dar
saltos por la salita y a romper cosas que mi madre tenía en las estanterías: un
búcaro de porcelana, una copa mía, del campeonato de fútbol escolar, un
marinero de madera, un payaso de escayola pintada y un par de trofeos de
concurso de baile.
Cuando
mi madre oyó el jaleo, vino corriendo. Vio lo que estaban haciendo los
monstruos de la tele e imaginó que yo los estaba imitando, de manera que lo
primero que hizo fue apagar el televisor. Luego recordó el remedio de la
vecina, preparó un vaso de agua con azúcar y me obligó a tomármelo. Se me pasó
enseguida....
Otros
experimentos:
PAZ: Pócima de Amor
Zalamero
TRÁFICO: Transporte Rápido
para el Agua de la Fuente Individual, Cómodo y Original
CAMAL: Canal Abierto para
Mirar con Absoluta Libertad
REFRESCO: Recipiente
Especialmente Fantástico de Refrescar Económicamente Sin Consumo Oneroso
SOFÁ: Silla Optimizada
para ser Feliz Amorosamente
Fragmento del libro: Conrado, un científico enamorado
Autor: Pep Castellano
Ilustraciones: Jorge del Corral
Editorial: Algar
Colección: Colección Calcetín
Actividades:
- Conrado hace sus experimentos en una alquería. Sabrías describir esta palabra e imaginar qué múltiples cosas podemos encontrarnos en ella?
- ¿Puedes inventar otras pócimas llamándolas con nombres espectaculares?
- Escribe un cuento o poema y envíalo acompañado de un dibujo con vuestro nombre, apellidos, curso, colegio y número de teléfono particular a:
Grupo Leo
Apartado de correos 3008
03080 ALICANTE