Trabajos del alumnado de 2º eso del Colegio Sagrada Familia de Alicante

miércoles, 20 de septiembre de 2023

Trabajos del alumnado de 2º eso del Colegio Sagrada Familia de Alicante

Comenzamos un nuevo curso. Esperamos que hayáis leído un montón durante las vacaciones y tengáis muchas cosas que contarle al mundo. Seguro que seguiréis colaborando con vuestro profesorado y enviándonos vuestros trabajos para publicarlos. Ánimo y a escribir, que los bolis y cuadernos están vacíos.

Miedo a perderla

Tus ojos como estrellas en el cielo.

tu sonrisa como el sol más brillante,

tus miradas como mi fuente de energía,

tus pasos acercándose como un mayor terror,

tus palabras como mi gran destrucción,

tus abrazos como mi mejor tirita,

tu adiós como un hasta nunca,
mis ojos como una llovizna.

Aitana López Soler 2º ESO A

Oda a la chancla

Tú que me ayudas,
tú que me salvas,
cuando camino
no hay peligro.
Tú me guardas
los pies me aguardas
hasta llegar a casa.
Y usar la cama
hecha de goma
que no se moja.
Al estar en la playa
ya nada me daña.
Tú tan ligera
como una tijera.
Siempre dispuesta
por un pie ser puesta.
A veces te rompes,
pero no te enojes
ya que al día siguiente,
otra vez reluciente,
eres hermosa,
siempre preciosa.
A veces te dejo
al lado de mi espejo.
Chancla, chancleta,
Eres perfecta.

Marat Sanzhapov 2º ESO A

Abraza

A mucha gente no le gusta abrazar,

pero abrazar no es solo con tus brazos rodear,

sino que es algo más profundo,

es más que un gesto, es todo un mundo.

Abrazar puede sanar heridas,

te puede levantar en batallas perdidas.

Puedes sentirte fuerte en un momento difícil;

por abrazar, no te sientas imbécil.

Abrazar puede ser con palabras,

con miradas o con sonrisas regaladas.

Un abrazo es decir “te quiero”

cuando esa persona está metida en un enredo.

Si te digo: “Sé fuerte”, te he abrazado

así como decir olvida tu pasado,

sigue adelante como los de Alicante

y no les creas a los que quieran tumbarte.

Tampoco debes esperar abrazos

de gente que solo sabe dar puñetazos.

Cuando estés solo,

recuerda que estás contigo,

dite a ti mismo algo bonito,

ahí sentirás ese abrazo

que te llevará de nuevo al circuito.

Sebastián Bustos Carmona 2ºESO A

¿Qué es para ti la belleza?

En estos momentos odio no ser creativa.

¿Qué escribes cuando en clase te preguntan qué es para ti la belleza?

-Sorpresa, no tengo ni idea.

En un primer momento pensé en el arte. En esos cuadros que miras y lo primero que piensas es “guau”, pero… ¿sería aquello suficiente para mi profesora?

Me recogí el pelo castaño claro en un moño mal hecho para entrar en ambiente y comencé a pensar en cosas que me parecían preciosas: los campos de girasoles, el cuerpo humano, el silencio y la organización de las bibliotecas, los reflejos de la purpurina al sol, los ramos de tulipanes…

Debería ser como mis compañeros de instituto, todo sería más fácil. Escribiría alguna tontería bastante obvia y presentaría el trabajo a mitad. Pero yo no soy así. Aparte de que mis notas debían ser muy altas para entrar en la carrera de mis sueños, nunca me he considerado una persona conformista.

Empecé a estresarme, ¿qué es para ti la belleza, Lana?

Me miré al espejo. Nunca me he considerado una chica fea, al revés, para tener quince años y estar en la peor edad para tener un poco de amor propio me gusta lo que veo al mirar mi reflejo. Tengo el pelo castaño claro a la altura de los hombros, aunque ahora mismo lo lleve recogido. Los ojos color miel son grandes y expresivos. Pecas adornan mi cara, que es de un color paliducho.

Me seguí observando. Siempre he sido más alta y delgada que los demás. Creo que tampoco me he sentido insegura en ese terreno.

Me miré el antebrazo, donde reside una cicatriz bastante fea de un corte que me hice de pequeña. Recuerdo que ese fue el detonante de que me interesara por la medicina, especialmente la cirugía.

Recuerdo a mi madre curándome el corte con muchísima delicadeza. Al principio estaba un pelín asustada, hasta que ella me explicó cómo mi cuerpo trabajaba en equipo para poder dejar una cicatriz y no un agujero en el brazo.

Después de ello le hice una pregunta que sigue grabada a fuego en mi cabeza:

-Mamá, ¿tú también tienes cicatrices?

-Todos tenemos cicatrices, y hay que estar orgullosos de todas y cada una de ellas.

Inconscientemente sonreí. ¿Acaso esta era la respuesta a mi pregunta?

¿Cuántas veces no nos hemos detenido a mirar quiénes somos? Al fin y al cabo, vamos a ser nosotros hasta el final de nuestros días.

Hay belleza en todos nosotros y no solo me refiero a lo físico. Cada pedacito de nuestra personalidad es belleza; da igual si eres inteligente, paciente, dulce o terco. Todo lo que nos gusta es belleza para nosotros; la música, el arte, los videojuegos o, incluso, una persona.

Escribí cada mínimo detalle de mi cuerpo, de mi personalidad y de mis gustos en aquel papel. Sorprendentemente todo unido formaba algo. Algo hermoso e inexplicable a la vez. Quizá lo que había escrito no tenía ningún sentido.

Pero era mi belleza, y eso es lo único que importaba.

Loreto Muñoz Ochando 2ºESO C