El pueblo de los azules sin guerra
Había una vez un pueblo muy lejano, en
el que vivían personas azules que siempre iban desnudas.
Eran guerreros y guerreras que se
entrenaban muy fuerte para hacer la guerra. Pero como eran felices, no había
ninguna guerra en la que pelear. No sabían cómo solucionar ese problema, y
entonces decidieron quedarse quietos como estatuas delante de la puerta de su
casa y no hacer nada.
Así lo hicieron hasta que llegó el
general; les dijo que ya estaba bien de estar parados, y que tenían que trabajar
y formar una familia.
Le querían obedecer, pero para casarse necesitaban tener un trabajo con el que ganar dinero para mantener a la familia: comer, cenar, merendar… y como no había guerra, no tenían trabajo.
También tenían que elegir una pareja.
Eso era más fácil porque como todas las personas iban desnudas, solo tenían que
fijarse para ver cuál les gusta más.
Pero llegaron al pueblo un chico y una
chica que sabían cosas, se pusieron a hacer ropa que regalaban y todos
empezaron a taparse. Todos querían ir ya tapados; empezaron a ir a cazar para
con la piel de los animales hacer ropa. Al final ya ninguno de los guerreros
azules estaba desnudo.
Entonces empezaron a tener otro
problema: cómo ya no se ven desnudos, no saben cómo elegir pareja. Por eso para
decidirse empiezan a fijarse en el olor: si
les cantan los pies, si llevan perfume o desodorante, si se duchan más, si
se enjabonan bien…
Pero llegó una enfermedad que los dejó a
todos sin olfato. -Ahora que no tenemos olfato ¿qué vamos a hacer? ¿Cómo
podemos elegir pareja?
Unos propusieron que se dedicasen a
cazar y el que consiguiera más alimento es el que tendría más ligoteo. Pero todos no estaban de
acuerdo.
Alguna persona pensaba que ni
conseguirían trabajo, ni pareja, y lo mejor era volver a quedarse quietos como
estatuas delante de la puerta de su casa y no hacer nada. Pero la mayoría lo
rechazó, porque sí querían encontrar trabajo y pareja.
Al final se reunieron y tomaron la
decisión de que lo mejor era aguantar y esperar a que se acabara pronto la
enfermedad y con una vacuna volver a la normalidad, recuperar el olfato y luego,
con la ayuda de la familia, encontrar pareja.
También encontraron una solución al
trabajo: como no querían dedicarse a hacer la guerra, buscaron cerca tierras
para cultivar y montar una granja; así tendrían suficiente para mantener a la
familia.
Y, por último, decidieron que se
quedarían vestidos ya para siempre porque desnudos pasaban mucho frío y no
querían volver a estar enfermos nunca más.
Autores: Sebastián T,
Milagros C, Jairo P.
Ilustrador: Sebastián
T.
Centro Ocupacional para personas adultas con
diversidad funcional e intelectual La Tramoia IVASS-Elche. Cuento elaborado de
manera grupal en el Taller de Cerámica
ACTIVIDADES:
-Escribe un cuento o poema con dibujo y
envíalo por correo postal a:
Grupo Leo
Apartado 4042
03080 ALICANTE
o por email a grupoleoalicante@gmail.com
No olvides poner tu nombre y apellidos,
curso, colegio. Podría ser publicado en nuestro BLOG
No hay comentarios:
Publicar un comentario