Reseña:
Había una vez un oso que
encontró una cosa muy extraña en el bosque. ¡Nada menos que un gran piano!
Piensa
que esa cosa, que no sabe lo que es ni cómo se llama, suena horrible.
Entonces, tocó las teclas
y, a través de las bellas melodías que había aprendido, emprendió una aventura
que lo llevó a un mágico lugar: la ciudad. Por fin, estaba en el lugar de sus
sueños. Toca en conciertos, en teatro a sala llena,
ante un público que lo aplaudirá siempre de pie.
Sin embargo, en el fondo
de su corazón algo lo inquietaba… le faltaba algo:
sus amigos, su lugar.
De
esta conmovedora historia se desprende un tierno mensaje: los sueños nos pueden
llevar muy lejos, pero nuestros seres queridos siempre nos esperarán de
regreso.
Excelentes ilustraciones de David Litchfield que contrastan muy
bien dos mundos: el bosque y la ciudad.
El autor e
ilustrador:
David Litchfield es un ilustrador de Bedfordshire en el Reino Unido. Está
representado por The Bright Agency. David comenzó a dibujar cuando era muy
pequeño, creando Star Wars y
los cómics de Indiana Jones para
sus hermanos mayores. Desde entonces, el trabajo de David ha aparecido en
revistas, periódicos, libros y camisetas. También ha expuesto sus ilustraciones
tanto en exposiciones individuales como grupales en el Reino Unido, Europa y
América.
Ganador del premio
Waterstones Children's Book: Mejor libro ilustrado 2016.
EL OSO Y EL PIANO
Un día, en el bosque, un pequeño osezno
encontró algo que no había visto nunca.
“¿Qué debe ser esta cosa tan rara?”,
pensó.
Y la tocó tímidamente con sus regordetas
pezuñas.
¡PLONC!
La cosa rara hizo un sonido espantoso.
Así que el osezno decidió marcharse.
Pero regresó al día siguiente, y al otro
también.
Y así durante días, semanas, meses y
años, hasta que….
Consiguió que los sonidos que emitía la
cosa rara fueran hermosos: el oso se había convertido ya en un enorme oso
pardo.
Muy
pronto, el resto de osos del bosque empezaron a acercarse al claro.
Cada
noche se reunían para escuchar las melodías mágicas que producían el oso y
aquella cosa rara.
Entonces
una noche, una niña y su padre descubrieron el claro.
Le
explicaron al oso que aquella cosa rara era un piano y que los sonidos que
producía eran música.
-
Ven a la ciudad con nosotros- le sugirieron…
Tocó en conciertos, en teatros enormes.
Las entradas se agotaban…
Ganó premios.
La
ciudad le ofrecía todo lo que había imaginado.
Sin
embargo, en el fondo de su corazón, experimentaba una lucha interna.
Tenía
fama, premios y toda la música del mundo, pero añoraba el bosque.
Añoraba
a sus amigos.
Añoraba
su casa.
Autor e
ilustrador:
David Litchfield
Editorial: Blume
1. El oso no conocía el piano ni los sonidos
que salen de él. ¿Jugamos a taparnos los ojos, que un compañero toque distintos
instrumentos y acertemos de cual se trata?
2. El oso echa de menos a sus amigos. Si te
fueras lejos ¿a quién añorarías tu? Piensa en ellos e intenta decirles algo
bonito.
3. Imagina que te encuentras un instrumento.
¿qué aventura podrías tener juntos?
4. Escribe un cuento o
poema y envíalo por mail (en fichero Word) acompañado de un dibujo (en fichero
JPG) y de tu nombre, apellidos, teléfono, curso y colegio a:
Podrá ser publicado en
nuestro blog.
1 comentario:
Precioso cuento.La lusión del Oso que explora aquel objeto y termina apreciando la belleza de los sonidos.Se convierte en un artista de conciertos. Es aclamado,se ilusiona y hace feliz a las gentes.La ilusión y la entrega le hacen famoso. Pero llega un momento que quiere volver a su origen, a su mundo. Decide volver a su ambiente. Echa en falta su entorno.
Se puede llegar a grandes metas pero nunca olvidando de donde se procede.
Publicar un comentario